VenEmerita... Ven!

Aparecieron en la noche oscura 

con sus capas relucientes,

me llenaron de amargura

al llevarme pal cuartel.

Sapos, buitres y alimañas

cuerno duro, verde piel

vacíos de sentimientos

¿ por qué fueron a nacer ?

Y aunque quieran parecer

angelitos, de la guarda,

no me engañan, yo lo sé

que no es lo mismo guarda, que guardia

como tampoco lo es

ayudar al pueblo llano

y asesinar por la espalda

a quien se ponga de pie.

Sapos, buitres y alimañas

cuerno duro, verde piel

vacíos de sentimientos

más les valía tener

una bala en el cuerpo

¡ que digo una ¡ mejor dos, o tres !!

no vallan a levantar la cabeza

esas bestias inhumanas

de entre malvas y maleza

de entre el mármol y el ciprés.

Más les valía dejar esta vida

e irse al cielo con su Dios,

ese que los quiere tan bien,

que bendice sus tricornios,

sus torturas y el retén.

Ven Emérita ven,

ven y mira cuanto dolor

cuanta sangre, cuanto horror

deja tras de si, tu estirpe maldita.

Cuando llegara el día

en que nos podamos reunir

junto al fuego de la hoguera

sin miedos, sin temores, sin banderas,

cantando aquello 

que la razón común decía:

Viva la guardia civil,

viva la guardia civil,

en el fondo de la tierra,

donde no pueda salir.